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Bulimia nerviosa

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Bulimia nerviosa

Tiempo de lectura: minutos

La bulimia nerviosa, a la que a menudo se hace referencia solamente como bulimia, es un trastorno alimentario. Una persona con bulimia tiene dificultades para regular su ingestión de alimentos.  Con frecuencia se producen períodos de comer en exceso seguidos de períodos de inanición. También es corriente que alguien con bulimia trate de deshacerse de los alimentos o calorías que ha consumido, por ejemplo, provocándose el vómito.

Qué es la bulimia nerviosa

Si usted padece de bulimia, tiene ciclos de comer demasiado en corto tiempo –con frecuencia en secreto.  A esto se llama atracarse de comida o atracón.  Atracarse por lo general conlleva comer grandes cantidades de alimentos altos en calorías, a los que se considera como golosinas (por ejemplo, chocolate y tartas).  Esto está seguido de un sentimiento de vergüenza y, a veces, de gran ansiedad.

Si tiene bulimia, usted se deshace de la comida o las calorías que ha consumido. A esto se le llama purgarse. Usted puede hacer esto vomitando, tomando laxantes, diuréticos (pastillas de agua) o posiblemente medicamentos ilegales llamados anfetaminas, ejercitándose en exceso, ayunando, o mediante una combinación de estos.

Aproximadamente una de cada 50 mujeres tiene bulimia en algún momento de su vida. La bulimia con frecuencia se desarrolla en mujeres hacia el final de la adolescencia  o al entrar en sus años veinte, pero puede ocurrir a cualquier edad tanto en hombres como en mujeres. La bulimia es menos común en hombres –por cada 10 mujeres con bulimia, aproximadamente un hombre tiene el padecimiento. Si usted tiene bulimia, por lo general estará dentro del peso normal para su estatura. El otro trastorno alimentario de importancia es la anorexia nerviosa, que se caracteriza por una pérdida de peso excesiva. Algunas personas con bulimia han tenido anorexia o la desarrollan.

Síntomas de la bulimia nerviosa

Si usted tiene bulimia, es posible que presente estos síntomas:

  • no comer con otras personas o ir al baño después de las comidas para vomitar los alimentos que ha comido
  • tener un ciclo atracón-purga por lo menos dos veces por semana durante tres meses o más  
  • almacenar comida en secreto
  • estar obsesionado con el ejercicio
  • volverse reservado y sin deseos de hacer vida social
  • autoagredirse
  • Si tiene bulimia, está preocupado por pensar continuamente en comidas o antojos y tiene un intenso temor a subir de peso.  Usted puede tener una visión distorsionada de su cuerpo y pensar que es más voluminoso de lo que es. Podría sentirse deprimido y ansioso, encontrar difícil el concentrarse y tener sentimientos de culpa y vergüenza por sus hábitos de comida.

Físicamente puede no haber signos. Su peso puede fluctuar –probablemente no estará muy por debajo del peso, y puede tener algo de sobrepeso.

Otros síntomas de la bulimia nerviosa pueden incluir:

  • distensión abdominal y sensación de llenura
  • cansancio y debilidad
  • indigestión
  • dolores de barriga
  • dolor de garganta (de vomitar)
  • estreñimiento o diarrea
  • menstruación irregular

Consecuencias de la bulimia nerviosa

Con el tiempo, la bulimia puede conducir a varios problemas físicos. Estos pueden incluir:

dientes cariados o manchados, enfermedad de las encías y mal aliento causado por ácido estomacal en su boca debido a vómitos regulares –también, manchas o aspereza en la piel de sus nudillos o dedos si los usa para provocar el vómito;

  • un rostro abultado alrededor de su mandíbula debido a la inflamación de las glándulas salivares (glándulas en la boca que producen saliva)
  • deshidratación
  • daños en los riñones
  • inflamación de su estómago y esófago (el tubo que va de su boca a su estómago), causada por el ácido del vómito
  • daños en su corazón y palpitaciones (latidos irregulares)
  • manos y pies hinchados
  • piel reseca y pérdida del cabello
  • daños en sus músculos estomacales causados por el uso de laxantes

Es importante recibir tratamiento para la bulimia con el fin de reducir el riesgo de estas complicaciones.
 

Causas de la bulimia nerviosa

No está claro por qué algunas personas desarrollan bulimia. Es probable que las razones sean diferentes para cada uno. Puede haber razones de origen emocional, físico y social.
Los siguientes problemas emocionales o de salud mental también se relacionan con la bulimia:

  • baja autoestima – una apreciación negativa del valor propio que se relaciona con el peso corporal
  • ciertos estados de ánimo, particularmente la depresión
  • trastorno obsesivo-compulsivo – alteración causante de ansiedad por pensar obsesivamente en determinadas cosas o por hacer ciertas cosas

Si usted tiene una personalidad perfeccionista o alguna de estas características, un trastorno alimentario puede darle la sensación de control y de logro.

Hay ciertos otros factores que conllevan mayor probabilidad de que usted desarrolle bulimia, por ejemplo:

  • vivir en una sociedad occidental
  • ser influenciado por imágenes de delgadez a través de los medios de comunicación
  • tener diabetes tipo 1
  • para mujeres, empezar la menstruación a una edad temprana
  • haber tenido anorexia
  • haber estado en muchas dietas de pérdida de peso en el pasado
  • tener antecedentes familiares de trastornos alimentarios –esto podría deberse a factores genéticos, o por imitar la conducta de otros familiares
  • un determinado suceso estresante emocionalmente, tal como divorcio, abandono del hogar o una relación familiar de maltrato
     

Diagnóstico de la bulimia nerviosa

Es muy importante obtener ayuda. Admitir que usted tiene un problema es el primer paso, aunque pueda ser el más difícil. Dar ese paso significa que usted pueda hallar el apoyo y el tratamiento necesarios para acabar con la bulimia y mejorar su calidad de vida.

Primero, hable con su médico de cabecera. El mismo le preguntará acerca de su vida y sus hábitos de comer, y le examinará para ver si hay algún problema físico como consecuencia de la bulimia. 

Es posible que le refiera a un psiquiatra o psicólogo que esté capacitado en el tratamiento de trastornos alimentarios.

Tratamiento de la bulimia nerviosa

Debe comenzar el tratamiento de la bulimia lo más pronto posible.
Usted puede recuperarse de la bulimia, pero el proceso podría ser largo, por lo que, en tiempos de estrés, pudiera tener recaídas. Para que el tratamiento funcione, usted debe tener deseos de mejorar.

Autoayuda

A veces la bulimia puede ser tratada mediante un programa de autoayuda con la asistencia de un terapeuta. Este tratamiento le permite desarrollar conocimientos que le ayudarán a controlar su bulimia.

Pudiera serle útil llevar un diario con sus hábitos alimentarios y aprender a comer sano y controlar su peso de manera sensata.

También podrían ser de ayuda los grupos de apoyo.  Podría ser reconfortante hablar con otras personas que han tenido sentimientos y experiencias similares.

Medicamentos

Su médico de cabecera puede recetarle medicamentos (por ejemplo, fluoxetina) para tratar la depresión a corto plazo. Los antidepresivos pueden reducir los atracones y las purgas.  No obstante, no hay evidencia clara de que puedan tratar a largo plazo los trastornos alimenticios, por lo que usted necesitará también otro tipo de ayuda.

Terapias de conversación

Con frecuencia se usa un tipo de tratamiento de conversación o psicoterapia llamada terapia cognitivo-conductual (CBT, en inglés). La CBT le puede enseñar formas más saludables de pensar en la comida y reconstruir su autoestima. Probablemente usted tendrá de 16 a 20 sesiones a lo largo de cuatro o cinco meses.

La terapia interpersonal (IPT, en inglés) es otra terapia de conversación que le permite discutir sobre sus relaciones con otras personas. Es posible que al reconstruir estas relaciones, usted deje de usar la comida como apoyo emocional. Estos tipos de terapia por lo general toman más tiempo; alrededor de ocho a 12 meses.

Tratamiento en el hospital

La mayoría de las personas que tienen bulimia no necesitan internarse en el hospital.  Pero si usted tiene graves problemas de salud que ponen en riesgo su vida, o si usted corre el riesgo de suicidarse o autoagredirse, es posible que necesite ser ingresado en un hospital.

Ayuda y apoyo

Es doloroso para los seres queridos ver cómo usted arriesga su salud y es natural que quieran ayudarle, aunque a usted le parezca que la presión o las críticas indeseadas pudieran empeorar la situación. Quizás usted desee tomar sus propias decisiones pero también necesite mucho amor y apoyo.

Si usted admite que tiene un problema, los demás podrán ofrecerle ayuda en asuntos prácticos tales como buscar asistencia médica y grupos de apoyo.

Los grupos de apoyo pueden brindar asesoramiento e información para usted, sus amigos y sus familiares.

Diferencias entre anorexia y bulimia nerviosa

Ambos son trastornos alimenticios y a menudo se alternan o se suceden uno a otro, pero presentan diferencias.

La anorexia es el medio a engordar, lo que lleva a quien la sufre a dejar de comer. Por eso, es frecuente que se salten las comidas o tiren los alimentos. Por su lado, la bulimia incluye un descontrol en las comidas, con los característicos atracones. De ahí el uso de laxantes o inducir el vómito para “liberarse” de lo ingerido.

Preguntas y Respuestas

Puede ser difícil determinar si alguna persona cercana tiene bulimia, porque él o ella se esforzarán mucho por ocultarlo. Con frecuencia, las personas con bulimia tienen un peso corporal normal, pero algunas tienen variaciones de peso.  Si usted está preocupado porque su amigo o familiar tiene bulimia, hay un número de signos que usted puede buscar.

Explicación

Si su amigo o familiar tiene bulimia, probablemente usted ya está consciente de que algo anda mal. Hay varias conductas comunes que muestran las personas con bulimia, pero es importante recordar que muchos de los signos de bulimia están presentes con otros problemas.

Si alguien a quien usted conoce tiene bulimia, es posible que haga lo siguiente.

  • Hablar de su peso o figura, y pensar que tiene sobrepeso.
  • Estar siempre preocupado con lo que come y porque puede subir de peso.
  • Dar excusas con regularidad para evitar comer con usted o con otras personas (por ejemplo, diciéndole que ya ha comido o que no está hambriento).
  • Ir al baño inmediatamente después de comer.
  • Preocuparse por dinero porque puede ser que lo esté gastando en comida para atracones o en laxantes y diuréticos.
  • Hacer demasiado ejercicio.
  • Parecer cansado y ansioso, especialmente alrededor de las horas de comer.
  • Retraerse de asistir a eventos sociales o autoaislarse.
  • Tener la cara inflada debido a la inflamación de las glándulas salivales a causa de los vómitos. También podría tener dientes desgastados debido a los vómitos.
  • Hablar acerca de lo que usted debiera y no debiera comer.
  • Es importante que usted esté pendiente de los signos de bulimia y, si está preocupado por su amigo o familiar, sería recomendable que busque asesoramiento profesional antes de expresarle sus preocupaciones.

Puede ser difícil saber cómo ayudar a un amigo que tiene bulimia, especialmente si el amigo es muy reservado respecto a sus sentimientos.  Pero hay varias cosas que usted puede hacer si alguien a quien conoce tiene bulimia.

Explicación

Es importante que usted hable con su amigo para tener una idea más clara de sus sentimientos con respecto a la bulimia. Esto le ayudará a usted a comprender por lo que está atravesando su amigo y cómo está haciéndole frente a los síntomas.

A usted le puede ser difícil hablar al principio con su amigo ya que el mismo puede volverse agresivo o reservado. Esto podría ser debido a que su amigo está preocupado por el posible rechazo o no quiere reconocer que tiene un trastorno alimentario. Si su amigo admite que tiene bulimia, anímele a que busque ayuda profesional. Usted  podría encontrar ayuda médica y grupos de apoyo en nombre de su amigo. Su amigo puede valorar el apoyo que usted le ofrece para hacer una cita o acompañarle en la primera consulta.

Trate de que su amigo se sienta seguro y relajado para que pueda hablar abiertamente con usted. Es importante que usted le exprese sus preocupaciones de una manera afectuosa y considerada. Si su amigo siente que no está listo para hablar, hágale saber que usted le apoyará y seguirá siendo su amigo.
Sería recomendable que buscara más información acerca de la bulimia. También podría ser de ayuda hablar con otras personas que estén en la misma situación que usted. Usted puede hablar sobre cómo le hace sentir a usted y compartir sus ideas sobre distintos enfoques.

No culpe a su amigo por su trastorno alimentario, ni trate de persuadirle de que cambie. Esto podría alejar más a su amigo. Es importante que el mismo esté en control de la recuperación. No apresure a su amigo, ya que podría perder su confianza. Lo más importante es hacerle saber que su apoyo siempre está ahí.

Si usted tiene bulimia estando embarazada, está arriesgando la salud de usted y la de su bebé. Es importante que usted busque ayuda médica para reducir los riesgos relacionados con la bulimia.

Cuando usted está embarazada es importante que tenga el apoyo correcto de profesionales y de personas que se preocupan por usted. No tema ser honesta y comparta sus ansiedades relacionadas con su cuerpo, alimentos o con sus emociones para que pueda tener el mejor asesoramiento y apoyo.

Explicación

Tener bulimia durante el embarazo puede poner a su bebé en riesgo de poco peso al nacer y usted podría tener más probabilidades de complicaciones durante su embarazo.  Usted también corre el riesgo de sufrir depresión posnatal.

Si usted tiene bulimia y está embarazada, es posible que se preocupe acerca de ganar peso y del cambio en su figura.  Sin embargo, usted puede encontrar que sus síntomas de bulimia mejoran durante el embarazo, porque usted está consciente de los efectos perjudiciales en su bebé por nacer.  Usted debe tratar de dejar de vomitar, de usar laxantes o pastillas de agua (diuréticos) ya que estos pueden afectar su embarazo.

Es importante que hable con su médico de cabecera y permita que profesionales de cuidados de salud la apoyen en todo su embarazo y después de que haya dado a luz. Su médico de cabecera la puede asesorar acerca de su embarazo. El mismo la referirá a un obstetra (un doctor que se especializa en embarazo y parto) que tenga experiencia con embarazos similares.

También deberá hablar con su partera y visitador sanitario acerca de su trastorno alimentario. Ellos pueden darle a usted y a su bebé mejor apoyo y ayudarla durante su embarazo y después del parto.
Usted puede ser referida a un especialista en trastornos alimentarios que trabajará junto con los otros profesionales médicos apoyándole a usted para darle consejos concretos e información médica acerca de la bulimia.

Es importante mantener una dieta saludable y balanceada durante su embarazo para no poner a su bebé en riesgo de mal crecimiento y desarrollo.  Usted debe hablar con un nutricionista o dietista acerca de su dieta durante el embarazo y después. Le darán orientación sobre nutrición y pueden crearle un plan para que coma saludable. También le ayudarán a regresar a un peso saludable después de que usted dé a luz.
 

Esta información fue publicada por el equipo de Bupa de información sobre la salud, y está basada en fuentes acreditadas de evidencia médica. Ha sido sometida a revisión por médicos de Bupa. Este contenido se presenta únicamente con fines de información general y no remplaza la necesidad de consulta personal con un profesional de la salud calificado.
 

Fecha de publicación: 2020